Foto, cortesía de Dolores Shipe
Hoy, en 140 ciudades de Estados Unidos, nos reunimos personas que queremos defender nuestra libertad religiosa ante la nueva ley de salud que obliga a los ciudadanos a subsidiar el costo de anticonceptivos, aborto y esterilización, sin importar las objeciones religiosas que se tengan.
El punto de reunión fue el edificio federal de la ciudad, que casualmente está a media cuadra de las oficinas de Plan Parenthood.
Para nosotros esta es la primera vez que participamos en algo así. Gracias a Dios, fue una experiencia muy positiva, en la que mis hijos se dieron cuenta de que "no estamos solos", como una de mis hijas me dijo.
Como llegamos temprano, fuimos candidatos fáciles para una entrevista porque casi no había gente (me dijeron que la pondrían en su cuenta de Facebook). Una de las preguntas fue el por qué estábamos ahí... básicamente le dí dos razones principales: por creer que el derecho a la libertad religiosa es un derecho básico en este país y porque quería que mis hijos aprendieran que para defender lo que creemos, es necesario ser valientes, fuertes y activos.
Fue una experiencia muy edificante, había gente de todas las edades, había varios sacerdotes, religiosas, jóvenes universitarios, niños, bebés... el ambiente se sintió muy positivo y con mucho ánimo.
Una de las agradables sorpresas fue encontrarnos con un grupo de los estudiantes Pro-Vida de la universidad en donde vivimos. Aquí estamos con ellos:
El Rally duró más de lo que se esperaba, originalmente una hora. Hubo varios oradores, entre ellos, el presidente de la Universidad Fransiscana de Stubenville (en la foto de abajo), el presidente de 40 días por la Vida, David Bereit (con él en la segunda foto- con camisa azul y lentes). Por cierto que su familia también hace homeschooling, ahí estaba con su esposa y sus dos hijos.
Esto no termina aquí, que hay mucho que hacer. Hubo tres énfases principales en la protesta: primero, que necesitamos ponernos de rodillas para orar por esta situación, segundo, que necesitamos contactar al presidente, al vicepresidente y a los senadores de nuestro estado para pedirles la cancelación de este mandato, y tercero, que necesitamos elegir a un presidente que sea provida en las próximas elecciones.
Aunque mis hijos y yo platicamos un poco al respecto durane nuestro camino de regreso, siento que todavía hay mucho que aprender de esta experiencia. Espero hacerlo en los próximos días.
Y bueno, al final, nos nos tomamos una foto con otras familias homeschoolers de nuestro grupo:
Esto es todo por ahora, les agradezco enormemente sus oraciones y su apoyo por esta causa. Que Dios nos ayude a seguir luchando para saber defender nuestra fe. Todo lo podemos con la gracia de Dios, nada sin ella.
¡Todo por amor a Cristo y su Iglesia!
