El año pasado volvimos a representar la capa de San Martín partida en dos, según la anécdota de su vida, pero esta vez hecha con pan y mermelada.
Esta famosa anécdota nos recuerda que todo lo que hacemos hacia nuestro prójimo se lo hacemos a nuestro Señor Jesús. ¡Qué bendición son los santos que nos dan ejemplo de vida! Aprovecha esta fiesta para enseñarle a tus hijos sobre la generosidad hacia el prójimo y el desapego a las cosas materiales.
¡ San Martín, ruega por nosotros!
¡Todo por amor a Cristo y a su Iglesia!
Xhonané
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