Bibliografía Corazones
La historia se remonta al año 40, inmediatamente después de la Ascensión de Jesucristo a los Cielos. La tradición nos cuenta que la Santísima Virgen María se le apareció en vida mortal al Apóstol Santiago que pasaba por Asturias con otros ocho discípulos suyos para confortarlos, pues comenzaban la labor de evangelización en esas tierras españolas. En aquellos años España estaba invadida de paganismo. El Apóstol Santiago, hijo de Zebedeo, y sus ocho acompañantes que él mismo había escogido, recibieron entonces la bendición de la Santísima Virgen.
“En la noche del 2 de enero del año 40, Santiago se encontraba con sus discípulos junto al río Ebro, cuando La Santísima Virgen, le pidió al Apóstol que se le construyese allí una Iglesia, con el altar en torno al pilar donde Ella estaba de pie y su promesa fue: que ese sitio permanecería hasta el fin de los tiempos para que en virtud de la misericordia de Dios se obraran portentos y maravillas por la intercesión de María del Pilar, con aquellos que en sus necesidades imploren su patrocinio”. Texto de un documento que se conserva en la Catedral de Zaragoza del siglo XIII.
Desapareció la Virgen, pero el pilar quedó ahí. El Apóstol Santiago obedeció y empezó a construir la iglesia que María le había pedido.
La Santísima Virgen es el pilar que junto con los Apóstoles, sostuvo los inicios de la cristiandad. En esta advocación de nuestra Madre nos hace recapacitar al respecto, no nos dejará de sostener y de cuidar pues sabe el poder que su Hijo le ha otorgado. Y lo hará hasta el final de los tiempos.
Nos alienta, nos conforta, pero nos anima también a que nosotros junto con Ella seamos pilares para cada uno de nuestros iguales. Con nuestro ejemplo y nuestra palabra, con nuestra fidelidad a la Doctrina de Jesucristo, con nuestro devoción y obediencia al Santo Padre.
El amor a la Santísima Virgen, es signo de predestinación, ¿te quieres salvar? Ámala, ¿quieres gozar de la presencia de su Hijo por la eternidad? Ámala. Al igual que los primeros cristianos reunámonos en torno suyo para caminar seguros, ayudemos a otros hablándoles de Ella, para que la tomen también como protectora y Reina de sus vidas. Sería un buen propósito tratar cada día hablar de Ella a alguien, para que se difunda su devoción y su protección en muchos.
Comenta un santo de la Iglesia que si Nuestro Padre Dios le ahorró a María los sufrimientos de parto en el nacimiento de Jesucristo, no lo hizo así con nuestro nacimiento espiritual. Ningún dolor le fue dispensado, pues nuestra adopción ocurrió en el momento de la Cruz, cuando nos entregó Jesucristo como hijos suyos “Madre ahí tienes a tu hijo” “hijo ahí tienes a tu Madre” diciéndole al Apóstol Juan, quien se la llevó a su casa.
María nos adoptó entre todos aquellos dolores que traspasaban su alma, y como buena Madre nos cuida, y lo que deseo profundísimo es nuestro bienestar espiritual, nuestra salvación eterna.
Se han obrado muchos milagros alrededor de la devoción a la Virgen del Pilar; el primero de ellos consta que a un hombre le amputaron una pierna, y al día siguiente amaneció con su misma pierna milagrosamente.
Tenemos una Madre que conoce las miserias de sus hijos, no solo eso, se compadece de sus hijos que luchan para salir adelante en los asuntos humanos y los espirituales. No se desanima al ver que caemos una y otra vez, Ella está presente y nos levanta, nos sonríe, hace el camino mas sencillo, porque nosotros, sabiendo que hay alguien que nos quiere sin condiciones, y que habla ante su Hijo cosas buenas de nosotros en todo momento, nuestra lucha es sencilla y llevadera.
Ella sabe lo que necesitamos, Ella quiere ayudarnos, Ella puede porque así lo quiere Dios. Solo hay que acerarnos a su corazón amoroso y pedir.
Ella: es el pilar de nuestra esperanza cuando desfallece ante las dificultades, Ella es el pilar que nos sostiene en nuestras penas, que en muchas ocasiones son hondas, Ella es el pilar y afianza nuestra fe: nuestra barca no se hunde porque va Ella con nosotros, Ella es el pilar donde se apoya nuestra caridad, que ha de cubrir y cobijar hasta al enemigo, Ella es el pilar que podemos abrazar y llorar buscando su consuelo. Ella es Consuelo de los pecadores.
El mes de octubre, es tradicionalmente el mes del rosario. Oración sencilla y humilde como la Virgen, sabios, ricos, pobres e ignorantes, podemos rezarlo, ¡necesitamos rezarlo!
Contaba Sor Lucia vidente de Fátima, que cuando las apariciones de la Virgen, rezaban con Ella el Santo Rosario, la Santísima Virgen rezaba solo el Padrenuestro y el Gloria, y los pastorcitos las diez Avemarías, y mientras las rezaban, Ella sonreía al escuchar cuando se le recordaba el anuncio de su Maternidad.
Por Ella sabemos que el rezo del Santo Rosario es un arma poderosa contra el enemigo, y nos promete que si somos asiduos a esta devoción, aplacará nuestros vicios, y hará crecer nuestras virtudes, nos concederá la paz interior y exterior que tanto necesitamos.
**************
¡Feliz día de Nuestra Señora del Pilar!
Si vives en España y has tenido la bendición de visitar la Basílica de Nuestra Señora del Pilar, ¿me podrías compartir tu experiencia y tal vez fotos? Me gustaría compartirlo en Familia Católica. ¡Se me hace algo maravilloso que María Santísima haya querido ofrecer su bendición de esta manera a España!
Xhonane, it is indeed a blessing for Spain that Mary's Shrine of the Pilar is there. A blessing for al who are able to visit it too. blessings,
ResponderBorrarYes, I agree Gardenia! I, actually, didn't know that Mary appeared to St James when she was still alive! What a miracle! And that Basillica is the very first one to be dedicated to our Blessed Mother!
ResponderBorrarQue hermosa reflexión, me impresionó mucho saber que la fecha de aparición de la Virgen al Apóstol Santiago fue un 2 de Enero pues es la fecha de mi cumpleaños, por muchos años no usé mi nombre cristiano hasta que alguien luego de mi conversión me interpeló ante el significado de mi nombre de pila: Maria Auxiliadora.
ResponderBorrarUn abrazo
Quë lindo testimonio María Auxiliadora!! Gracias por compartirlo!!
ResponderBorrar