Fuente Foto
"Dice el Señor Todopoderoso: Convertíos a mí de todo corazón: con ayuno, con llanto, con luto. Rasgad los corazones, no las vestiduras, convertíos al Señor Dios nuestro, porque es compasivo y misericordioso". (Joel 2,12)
- Página para colorear del Miércoles de Ceniza. Tal vez quieras ver cómo hacer una página litúrgica con ella.
Por Cynthia G. de Hernández.
Este día tradicionalmente acudimos a la Iglesia a que nos marquen con la señal de la Cruz con ceniza. “Acuérdate, hombre, de que eres polvo y en polvo te has de convertir”.
Con estas palabras viene a nuestro pensamiento el momento de nuestra muerte y que no somos nada sin Dios.La meta final para el cristiano, es el Cielo, no debemos perderla de vista. Pensar en la muerte no debe entristecernos, sino nos ha de llevar a pensar si aprovechamos bien el tiempo que tenemos entre las manos. El pasado ya quedó atrás, el futuro no sabemos si llegará, pero hoy cada momento que tengo entre mis manos, ese es el que he de aprovechar para amar primero a Dios y luego a los demás.
El miércoles de ceniza es el inicio de la Cuaresma y ésta es tiempo de conversión. La verdadera conversión se manifiesta en las obras, en la conducta diaria, continua. En una lucha por mejorar en el comportamiento con la familia, en la oficina, en el lugar que nos toca trabajar o pasar muchas horas del día, quizá en la cama cuando uno está enfermo, ahí también puede haber una verdadera conversión.
Hoy Dios nos pide una penitencia especial que es el ayuno y la abstinencia. Esto ayudará a fortalecer el espíritu, e inclinarlo más hacia Él. Cumplámoslo con alegría y generosidad, es tan poco lo que nos pide El Señor a comparación de lo que Él pasó por nosotros.
Después de hoy también tradicionalmente hacemos una lista de pequeños actos de penitencia. ¿Soy capaz de no tomar el postre?, ¿de preferir un vaso de agua en lugar de un refresco?, ¿de mostrar una sonrisa y pasar por alto un momento difícil?, esto nos hará mas fuertes y resistentes ante las tentaciones del demonio.
No es tan complicado lo que se nos pide, es olvidarnos de nuestras preferencias para pensar en otros, es pasar por encima de mi mal humor para hacer mas agradable la vida a los demás. Vivirlo y enseñar a otros a vivirlo, por ejemplo a nuestros hijos según su edad sugerir o que ellos mismos opinen de que cosa podrían privarse, o que servicio pueden prestar a otros.
Esto nos llevará a ser el consuelo de Dios, cuando vea que nos esforzamos, aunque a veces no podamos lograrlo del todo, sonreirá y escucharemos esas palabras dirigidas a aquellos que luchan y no desfallecen “Siervo bueno y fiel, porque has sido fiel en lo poco, entra en el gozo de tu Señor”.
Me gusta recordar unas palabras de Santa Teresa de Ávila: “aunque no quiera, aunque no pueda, aunque reviente, aunque me muera”. Que sea así nuestra determinación de caminar con Cristo esta Cuaresma, de caminar con mis hermanos los hombres, con tal de que sean felices.
El camino al cielo es un camino arduo pero feliz, no olvidemos que lo que vale cuesta y vale mucho la pena el Cielo y la Felicidad Eterna.
¡Todo por amor a Cristo y a su Iglesia!
No hay comentarios.:
Publicar un comentario