Hoy es la fiesta de San Alfonso Liguori. Este es un santo al que admiro mucho por todo lo que le pasó y por todo lo que hizo para el servicio de la Iglesia.
Lo que leímos sobre él el día de hoy fue que San Alfonso era un excelente predicador, fue fundador de dos órdenes (Los sacerdotes Redentoristas y las Monjas Redentoristas), escribió más de 60 libros (por la calidad de sus escritos fue declarado doctor de la Iglesia), sufrió dolores tremendos de reumatismo que lo dejó encorbado en los útimos 20 años de su vida, fue un obispo que practicó pobreza extrema (comía muy poco, dormía en una cama de paja y cuando no podía viajar a pie, lo hacía en burro)...
Por todo esto, San Alfonso es un gran ejemplo para todos. Hoy, después de leer sobre su vida, estuvimos platicando cómo poder meditar en su vida y decidimos lo siguiente:
- Ponernos un tape entre la barbilla y el pecho. Por el reumatismo, su cabeza estaba tan encorbada que la barba le tocaba el pecho, pero aún así, él siguió predicando y escribiendo. Por eso escogi la foto que puse al principio, ahí se vé cómo estaba después de su enfermedad.
- Comer comida sencilla, sin condimentos extras. San Alfonso además de comer poco, buscaba no comer cosas muy apetitosas y, para sus ayunos, frecuentemente comía sólo pan y agua. Todavía no tengo fotos de esto, porque todavía no hago la comida. Si tengo oportunidad las agrego después.
Algo interesante, mientras nos poníamos el "tape" en la barba, es que una de mis hijas me dijo: "Pero mamá, esto lastima, no quiero que me duela"... este comentario me hizo pensar que esta es nuestra naturaleza humana. Muchos de nosotros no queremos sufrir, queremos buscar sólo las cosas que nos agradan. Pero he aqui´un hombre que va contra corriente, San Alfonso nos enseña cómo logró la santidad, aceptando el dolor en su vida y siguiendo adelante sirviendo a Dios.
¡Feliz día de San Alfonso Liguori!
¡San Alfonso, ruega por nosotros!
¡Todo por amor a Cristo y su Iglesia!
No hay comentarios.:
Publicar un comentario