"¡Oh, qué grande es el sacerdote! Si se diese cuenta, moriría... ¡Después de Dios, el sacerdote lo es todo!... Él mismo sólo lo entenderá en el cielo". San Juan María Vianey
Con motivo del Año Sacerdotal, leí la Carta del Papa Benedicto para su convocación, la Audiencia General y la Homilía de la Inauguración y me ha conmovido mucho la forma en que nuestro Papa se expresa en cada uno de ellos. Él utiliza muchas citas de San Juan M. Vianey ¡hermosas todas ellas!... por algo fue elegido el patrón de los párrocos. Te recomiendo mucho leer estos documentos.
El Papa Benedicto XVI ha querido dedicar este año al sacerdocio para "promover el compromiso de renovación interior de todos los sacerdotes y para que su testimonio evangélico en el mundo de hoy sea más intenso e incisivo" y lo ha confiado "a la Santísima Virgen María, pidiéndole que suscite en cada presbítero un generoso y renovado impulso de los ideales de total donación a Cristo y a la Iglesia que inspiraron el pensamiento y la tarea del Santo Cura de Ars."
Y bueno, ¿qué podemos hacer nosotros como familia?, ¿cómo podemos celebrar con nuestra Iglesia tan gran evento?, ¿qué podemos aprender con esta celebración?
Se me ha ocurrido hacer una Actividad durante todo el año, en el que cada mes se tenga un tema a reflexionar, las cuales publicaré el mes correspondiente. Para tener algo visible en nuestra casa, haré un banderín (como el de la foto) en el que colocaremos letreros y símbolos de cada uno de los temas que se vayan viendo, y así recordaremos los temas anteriores. Los temas que escogí son:
- Julio: Introducción al Año Sacerdotal
- Agosto: San Juan María Vianey
- Septiembre: Las Vocaciones
- Octubre: Nuestro Papa
- Noviembre: Nuestro Obispo
- Diciembre: Nuestro Párroco
- Enero: Los Sacerdotes y los Sacramentos
- Febrero: Las Partes del Templo
- Marzo: Vestiduras Sacerdotales
- Abril: Objetos Litúrgicos
- Mayo: Repaso y Cierre
¡Qué alegría celebrar la vocación sacerdotal! Como dice San Juan M. Vianey: "Un buen pastor, un pastor según el Corazón de Dios, es el tesoro más grande que el buen Dios puede conceder a una parroquia, y uno de los dones más preciosos de la misericordia divina".
¡Démosle gracias a Dios por nuestros sacerdotes, oremos por ellos y pidámosle a Dios que nos conceda vocaciones en nuestra familia!
Si quieres participar, envíame ideas para cualquiera de los temas anteriores o compárteme cómo están celebrando el Año Sacerdotal en tu parroquia.
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